martes, 2 de agosto de 2011

La familia real se lanza al agua

 Los primeros detalles que observo, en este inicio de regatas en la Copa del Rey de Vela en Palma de Mallorca, es la seriedad de Felipe. A mi me gustaba cuando sonreía y parecía feliz. También observo, que no está el rey por el náutico, parece que su rodilla se lo impedirá, pero sí su familia. Don Juan Carlos, se reunía el lunes con el presidente Zapatero, a las horas de las regatas y antes es el trabajo que la devoción. El año pasado escasearon y de ahí que Letizia y las niñas suplieran esa ausencia haciendo doblete y este año todos sus miembros están volcados. La presencia de las infantas, la reina, Iñaqui y los nietos, le dan mucha vidilla al Club Náutico. Igual es la crisis que les obliga a vacacionar, como muchas familias, en casa de los padres, lo cierto es que están haciendo mucho acto de presencia.
Eso para el turismo balear y para la regata dicen que es estupendo. Y si es estupendo para ellos, lo es para todos. Habrá más presencia de seguridad y por tanto una movilidad más reducida o incómoda, pero a cambio estas escenas reales dicen que son buenas. También noto una tendencia a ser agradecidos con las camisetas y los polos de la organización. Les veo uniformados y las gafas de espejos, parece que son moda. Por cierto, Irene Urdangarín es una monada y una fashionista.
El año pasado la reina ni apareció y las infantas mucho menos, así que estas escenas nos llenan de satisfacción. Lo que no entiendo es por qué no se incorporan las nietas Leonor y Sofía, parece ser que ellas no van a la escuela de vela como sus primos hermanos, pero todo se andará....o no, porque recuerdo que a Marichalar el mar no le llamaba y las regatas mucho menos. El finde semana y el lunes, Letizia y sus hijas no se incorporaron al grupo familiar, enseguida ha quedado subsanado, que luego ya se sabe que comienzan los corrillos sobre las desaveniencias entre unos y otros y fastidiamos las escenas idílicas.El martes Letizia y su suegra, doña Sofía, con las niñas han aparecido por el náutico. De ahí a seguir las regatas todos juntos en el yate Somni-que algunos acostumbrados a los trasatlánticos llaman lancha- hay un paso.¿lo veremos?, ¿cuándo?.

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