martes, 17 de enero de 2012

El minivestido de Letizia y el Toison de oro a Sarkozy

No quiero pensar tal cosa, pero pudiera ser que la lavadora de La Zarzuela tenga el programa de centrifugado disparado o el nivel de temperatura a tope y de ahí, que les encoja los vestidos. Eso tienen que hacerselo ver. Y que conste que no quería tratar este tema, que ultimamente princesa Letizia estaba manteniendo un perfil bajo, tanto en el atuendo como en el comportamiento, con una vestimenta indiferente en colores opacos. Para la toma del Toison de Oro a Sarkozy en el Palacio Real de Madrid creo que no era el corto más adecuado. Siempre le pasa en los momentos de gran expectación. Me parece a mi que ha vuelto a llamar la atención. Ese corto era anómalo. Lo primero que pensé es la mala jugada que te gastan las lavadoras inteligentes y luego, en que menos mal que en el comedor de gala usan mantelerías largas que tapan los tablones con borriquetas porque sino a más de un señor, de los de enfrente de la mesa, se le habría caído la servilleta al suelo sin parar. Por cierto que, consultando la web de la casa real, he visto que entre los Toisones de oro que lleva concedidos el rey, no se menciona a su cuñado, Constantino, que, bastón en mano, allí estaba con su cordero de oro prendido en la solapa. Quién se lo ha dado?
Ese mini vestido es ideal para hacerte la pierna larga aunque te deje en evidencia el arqueamiento y la ausencia de carne que cubra los huesos. A cambio, reconozcamos que estiliza mucho. También es verdad, que es una medida de corto incompatible con sentarse en una silla, sin levantar la expectación de Sharon Stone y eso que no venía Carla Bruni. No había necesidad. Ante mis dudas sobre el tema del vestido, un par de amigos me han dado tres claves, a saber:
-"Debe ser que con la crisis solo puede comprarse vestidos de "poliester".
-"Es que la tela se la llevo el cuñado"
-"Leticia se perdió la clase sobre efecto del agua caliente en los tejidos".

Ahora me queda por saber si el modelo es de Felipe Varela y lo colocará esta noche en el escaparate de su tienda, como suele ser su costumbre. Cosa que a mi me parece muy bien, que la cosa está muy mala y hay que vender y princesa Letizia es un icono.

2 comentarios:

  1. Lástima que no haya venido Carla Bruni para darle a Letizia una lección de... lavado a máquina.
    De estilo no, que princesa Letizia es icono, ella lo sabe y por eso parece que no se deja aconsejar (bien). En fin...

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  2. Muy bueno el artículo; menos mal que nos quedan periodistas como vosotros cantando las verdades del barquero. No entiendo por qué se empeñan en meternos a esta chica, cada día con más aspecto de poligonera, cuando saben todos que en las encuestas hace años que está por debajo de Belén Estéban. NO sólo produce estupor con sus disfraces de choni-princesa, sino que tenemos que aguantar la vergüenza que nos produce en días como ayer con toda la prensa internacional en el evento. Esta pardilla sigue confundiendo la discoteca del polígono con un evento de esa categoría; cada día entiendo más por que hasta los monárquicos están empezando a declararse republicanos. Hartísima

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