Jesús Ortiz,padre de la princesa de Asturias,acude a declarar como imputado

A las diez de la mañana del viernes 5 de octubre, prestaba declaración como imputado por Alzamiento de bienes, el consuegro del rey y padre de la princesa de Asturias, Jesús Ortiz. Llegaba al Juzgado de instrucción número 2 de Pozuelo de Alarcón en Madrid, diez minutos antes de la hora de la citación, 10 de la mañana y lo hacía acompañado de su abogado.

Jesús Ortíz acude a declarar como imputado en el caso con número de reparto 1294. Poco más de media hora, estuvo dentro del juzgado de donde volvía a salir por la puerta principal, igual que entró y no por otro acceso más discreto y lo hacia con semblante serio pero erguido y acompañado de su abogado que iba un par de pasos por detrás y con la cabeza agachada. Ambos subieron al mismo coche en el que llegaron y se alejaron sin hacer ningún comentario.

Una fecha para declarar que supongo habrá sido muy estudiada para no llamar la atención y que no se montase el revuelo mediático que se organizó cuando acudía acompañada por su abogado, también sola sin sus hijos, la abuela de la princesa de Asturias a los juzgados de Cangas de Onís. Son días en los que el foco de atención está puesto en los juzgados malagueños con Isabel Pantoja y su exnovio y también, coincide que los príncipes de Asturias están fuera de España de viaje oficial en Ecuador y la Reina, visita las zonas afectadas por las tormentas en Málaga, Almería y Murcia. Un buen momento para declarar sin "circos".

Todo este lío se remonta en el tiempo. Según consta en la páginas amarillas de Oviedo, la sociedad Henar Ortiz Decoradora S.L se dedica a; Estudios de decoración. Venta menor de muebles, Artículos de hogar y menaje. Elaboración de proyectos de decoración y estilismo. Diseño de muebles y menaje. Ornamentación floral. Pintura decorativa, y venta de artesanía. Sin embargo, su cuenta de resultados es similar a la de muchos empresarios de este país; desastrosa. Ser la tía paterna de la princesa de Asturias no la excluye del cierre del negocio, declararse insolvente, acumular deudas, ni de ser denunciada por alzamiento de bienes y tener que acudir como imputada a declarar a los juzgados de Oviedo. El parentesco real no la excluye pero sí hace que su caso adquiera a su pesar, más relevancia

Cierto que sólo puede levantar bienes el que es deudor, algo que no son Menchu Álvarez ni Jesús Ortiz, al menos que se sepa. Pero sí que han podido ser cómplices de Henar sin saberlo, que es la que tenía problemas con su empresa y con la proveedora que le ha puesto la denuncia. Es posible que tanto el padre de Letizia como la abuela, no estuvieran informados al cien por cien de las deudas contraídas por la tía de la princesa. La ruina de Henar, llevó a los familiares, ahora imputados, a pedir una hipoteca inversa sobre el patrimonio que tenía la matriarca de la familia, la casa de Sardéu en Ribadesella, para así pagar un crédito de la tienda ruinosa de Henar. Sin embargo, la deuda de 23.000 euros que tenía contraída con la empresaria seguía sin saldar y pudo suceder que Henar no dijera nada de su morosidad a su hermano y a su madre.

Lo cierto, es que la deuda la arrastra desde hace años con una pequeña empresaria relacionada con las piezas de joyería que la tía de la princesa vendía y que había sido su proveedora cuando tenía la tienda de regalos. Al parecer la deuda particular que puede ser demostrada, hay otra de la que no constan pagares y al haber sido fiada no es posible demostrar, con Henar asciende a poco más de 23.000 euros y la mujer, intentó en numerosas ocasiones que por las buenas le pagara el dinero pero no hubo manera porque Henar alegaba que no tenía bienes.

La deuda es tan antigua que la contrajo antes de morir el abuelo de la princesa de Asturias. Al enterarse la empresaria de la muerte de Jesús Ortiz y deducir que heredaría parte de la casa de Soldeu, vuelve a insistirle a Henar para que salde la deuda. Sin embargo, lo que hacen los herederos es acordar que la casa es un bien privativo de la viuda y así no tienen derecho a ella los hijos Jesús y Henar, como herederos del padre. El problema viene, cuando meses más tarde, hipotecan la casa y de ahí el alzamiento de bienes.
La implicación de Jesús Ortiz viene porque tuvo que dar su consentimiento para aceptar que esa casa era un bien privativo de Menchu y de esa forma no podían heredar sus hijos al morir el marido. De esta forma Henar seguía siendo insolvente para saldar la deuda de 23.000 euros. La empresaria viendo que no había forma de cobrar y que se seguía dilatando en el tiempo, se decidió a poner una denuncia en la fiscalía superior de Asturias por alzamiento de bienes. El fiscal al apreciar indicios de delito la envía al juzgado, que es el que ahora les llama como imputados.

En cuanto se puso la denuncia y se apreciaron indicios de delito, se inició la instrucción. El primer paso es la toma de declaraciones de todos los afectados y para ello el juez dicta unas comparecencias. Los exhortos salieron el 9 de julio desde Cangas de Onis hacia los decanatos de Oviedo, Henar Ortiz, y Madrid, donde reside Jesús Ortíz, para que asignasen los juzgados a los que debían acudir los otros dos imputados.

Junto a Henar Ortiz, están imputados su madre Menchu Álvarez y su hermano, Jesús Ortiz. La primera en declarar fue la abuela de la princesa de Asturias también un viernes y casi a la misma hora, 10.15h del viernes 20 de julio en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Cangas de Onís. Henar Ortiz, acudía a los juzgados el viernes 27 de julio, el mismo día que la denunciante. El último ha sido Jesús Ortiz. De momento, es una toma de declaraciones como parte de una instrucción. Eso no significa que haya delito, sino un indicio de delito de ahí que se haya abierto la instrucción y una vez que se haya tomado declaración a los tres imputados y terminada la instrucción en el juzgado, el juez decidirá si hay juicio porque haya delito o por el contrario, que se cierre el caso.
Tanto si es una denuncia falsa o por despecho, dada la relevancia de los Ortiz como parientes de la Familia Real, el juzgado tiene que apreciar indicios de delito cuando llama a tres personas a declarar, con gran impacto mediático para la princesa de Asturias y por tanto para la Institución monárquica afectada de lleno por el caso Urdangarín aunque no tengan nada que ver los casos, pese a que coincidan en el tiempo.

El alzamiento de bienes es un delito socioeconómico que consiste en cualquier acción de un deudor dirigida a la sustracción u ocultación, de todo o parte de su patrimonio, para que de esta forma el acreedor encuentre dificultades para hallar elementos patrimoniales con el que poder cubrir su deuda.
La pretensión de la persona que realiza el alzamiento de bienes es salvar todo su patrimonio o algún bien del mismo, en beneficio propio o en el de alguna otra persona, obstaculizando de este modo la ejecución que podrían seguir los acreedores.
Según el artículo 257 del Código Penal español, las consecuencias serían las de una pena de prisión entre uno a cuatro años y multa de doce a veinticuatro meses. Los tres son sospechosos de un alzamiento de bienes.
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