Primeros
cambios en la Casa
La Reina no tiene intención de ser
un “florero”
Por Carmen Duerto (twitter; @cduerto)
Esta
semana comenzaremos a conocer, por medio de reales decretos, los nuevos
nombramientos en la Casa del Rey. Actualmente todos los cargos están en
funciones, unos serán reafirmados y la mayoría renovados. Lo dijeron los dos
reyes en sus respectivos discursos de intenciones; renovación y renovación. Y
eso afecta a los cimientos del viejo palacio de granito del monte de El Pardo,
donde se ubica la residencia de los reyes eméritos, don Juan Carlos y doña Sofía que también es la sede de la Jefatura
del Estado. En la planta baja del palacio de la Zarzuela, se encuentran los
despachos de los cuatro reyes.
Es
previsible que en ese nuevo orden, entren mujeres, baje la media de edad de los
empleados y entre más personal civil que militar. Y tal y como ha sucedido con
la abdicación, los cambios serán antes que tarde. Para empezar, en esta semana que
comienza habrá que ir aclarando cómo será y quién ocupará la
Secretaría de la reina Letizia
porque su agenda ha cambiado y también, habrá que resolver quién y cómo llevará
las agendas de los anteriores monarcas. Dado que la actual reina asume los
compromisos de agenda de la reina saliente.
Es
previsible que los reyes eméritos, dispongan en La Zarzuela de una secretaría
que les lleve sus asuntos, para lo que habría que desarrollar un Real Decreto
porque hasta ahora era inédita la figura del rey abdicado o que se acomoden a
las secretarías que ya existen y están reguladas por el Real Decreto de 1988.
También es posible que se amplíen las competencias de las existentes para dar
cobertura a los reyes salientes, que previsiblemente recibirán invitaciones,
peticiones de presidencias honoríficas o en ciertos casos, pueden representar
por delegación a los reyes vigentes, como ocurre con el resto de reyes
abdicados en Holanda y Bélgica. Allí donde no llegan los reyes en ejercicio,
pueden acudir en representación los reyes eméritos Juan Carlos y Sofía y también,
la infanta Elena, al menos, hasta la
mayoría
de edad de Leonor.
La
Casa de Su Majestad el Rey está estructurada según un Real Decreto que data del
año 1988. Ahí se deja claro que está constituida por una: Jefatura. La
Secretaría General. El Cuarto Militar y La Guardia Real. Y dependiendo de la Secretaría
General es donde se encuentra la Secretaría de Su Majestad la Reina y la
Secretaría del hasta ahora Príncipe de Asturias, que ha llevado desde su
creación en1995, el abogado Jaime
Alfonsín, al que todas las quinielas le sitúan como el relevo del actual
jefe en funciones, Rafael Spottorno.
Se da la circunstancia que Alfonsín ejercía de abogado en el despacho de Uría y
Menéndez, propiedad del que fuera tutor de don Felipe, Aurelio Menéndez y de
ahí salió para incorporarse hace 18 años a La Zarzuela para llevar todos los
asuntos de don Felipe de Borbón.
La Secretaría General se estructura en las siguientes Unidades:
Gabinete
de Planificación y Coordinación. Secretaría de Su Majestad la Reina. Secretaría
de Su Alteza Real el Príncipe de Asturias. Servicio de Seguridad. Relaciones
con los Medios de Comunicación. Protocolo. Administración, Infraestructura y
Servicios.
Con
arreglo a ese Real Decreto de 1988, también se especifica que el personal de la
Casa del Rey, puede ser de alta dirección, de dirección, funcionarios
eventuales, personal laboral y funcionarios de carrera civiles o miliares del
Estado, de las Comunidades Autónomas, de la Administración institucional y de
la Seguridad Social, así como del Poder Judicial y de la Carrera Fiscal. De
todos esos organismos se pueden dotar de personal. El rey tiene libertad para
nombrar y relevar a todo el personal civil y militar de la Casa. En total hay
unos 200 funcionarios trabajando en La Zarzuela.
Y cómo es la Secretaría de la Reina
El Jefe de la Secretaría, tiene consideración de personal de dirección
y trabaja en colaboración con los demás Departamentos de la Casa. El cargo lo
desempeña desde septiembre de 2013 el militar y economista Arturo Coello, un leonés que lleva en la Casa desde 2001, donde inicialmente trabajó como jefe del área
Económico-Administrativa, y posteriormente en 2002 se le asignó un puesto como
jefe adjunto de la Secretaría de Su Majestad la Reina. Relevó en el cargo al
teniente general Luis Cabrera, que
fue secretario de la reina Sofía
durante diecisiete años y que comenzó en 1987 como ayudante de campo del rey
Juan Carlos.
El
teniente general Cabrera ha
sido inseparable de la reina Sofía. A su Secretaría llegaban los regalos,
cartas y peticiones, que se catalogaban y archivaban para darle luego el curso
que fuera. El personal a su servicio se encargaba de atender las necesidades de
la reina y las infantas.
Básicamente la secretaría de la reina, lleva a cabo el estudio, preparación
y ejecución de todo lo que tenga que ver con las actividades de la hasta ahora
reina Sofía y de las Infantas Elena y Cristina, aunque de los asuntos concretos
de las infantas se ocupaba su asistente Carlos
García Revenga, que previsiblemente se aproveche esta “ola de cambios” para
que salga del organigrama, dado que el juez Castro no le levanta la imputación
en el caso Urdangarín.
En las quinielas para ejercer de secretario de la reina, sale el
nombre de Felipe Zulueta, un militar al servicio de la Casa y que cuenta con la
confianza de don Felipe de Borbón.
Por cierto, que en el Real Decreto que regula el organigrama de la
Casa Real, se menciona también una secretaría del Príncipe de Asturias, que
deberá cambiar de sexo. Quizás es pronto para que haya personal dedicado a
llevarle una agenda a una
princesa de Asturias que cuenta con ocho años y que de momento, si tuviera
algún tipo de actividad, como presenciar otro desfile militar o asistir a los
próximos Premios Princesa de Asturias, es perfectamente asumible por la
Secretaría de su madre la Reina Letizia.
Una secretaría, que al igual que el responsable de comunicación, cargo para el
que suena insistentemente Jordi Gutiérrez,
actualmente trabaja con Arturo Fernández en CEIM y la Cámara de Comercio de
Madrid y que anteriormente estuvo en prensa de la Casa Real y guarda una
excelente relación con doña Letizia, debería desempeñar un plan proactivo, con
iniciativa y que sepa ganarse el consenso de los medios de comunicación en
torno a doña Letizia y sacarle partido a las primeras e inevitables comparaciones
con don Juan Carlos y doña Sofía. Nada más llegar a La Zarzuela, hace diez
años, Letizia Ortíz lo dejó muy claro, no soy un florero y su secretaría no
será un jardín de Versalles, seguro.
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