Que regrese Galliano. Por qué le hacen esto a Dior?

     Esto no es una Rosa Moderna                                                                                                                         Vaya por delante que no he asistido físicamente al Museo Rodin a ver in situ la colección de Alta Costura otoño/invierno 2011-2012 de Dior en París.

Lo mío ha sido virtual y en tiempo real. La experiencia de haber visto ya muchos desfiles, me lleva a comentar lo que me parece sin haberlo tocado y olido; Un horror¡¡
No he entendido esas tiras del brilli-brilli como malo en muchas de las prendas, cosido como si fuera un apósito. Tampoco he entendido que, si la inspiración era la arquitectura y sus afamados arquitectos, se hiciera una cosa con tanto volumen y tan fea porque mira que hay arquitectura bonita.
El maquillaje me parece horrible con una combinación de colores anti-favorecedora. Quizás, para una carroza del orgullo gay sea perfecta, pero no para la pasarela. Los tocados eran tremendos. Una plancha metálica doblada, quería simular por casualidad el Guggenheim de Gehry? pues no lo he entendido porque cualquier parecido con algo bello es pura coincidencia.
¿Favorecedor? ni por asomo. ¿Elegante? no parecía ser la intención.
¿Los pelos eran un homenaje a Deborah Harry?, pues bien, pero la mujer que piensa gastarse una cantidad indecente en uno de esos trajes no olvidemos que estamos tratando con la Alta Costura, quiere al menos, que la peine alguien cualquiera que no sea Paquito El Chocolatero y mira que el hombre anima las fiestas de los pueblos...

Han podido tener mucho trabajo de batas blancas, no lo niego, pero el resultado qué poco lucido les queda. Sedas pintadas a mano.  Combinación de colores que ni un amateur o loco por las estridencias uniría. Esa lluvia de estrellas plateadas como tocados.....o esa especie de sombrero de Pierrot...No entiendo qué han hecho con esta firma en tan poco tiempo.                                             No sé si los responsables del desaguisado son Susanna Venegas y Bill Gaytten, pero lo cierto, es que fueron ellos los que salieron a saludar, una vez terminó el desfile. Esta vez a las batas blancas del taller les dieron el día libre y a Toledano, también.