Hasta la fecha no había oído nada similar, ni cuando vino el presidente de Francia, ni con el de Venezuela, ni con ningún otro. Ellos vienen y España, según los tratados y acuerdos que tenga el ministerio de Exteriores, se hace cargo de las partidas presupuestarías que le correspondan y jamás, se habían justificado por la publicidad que esos dirigentes generaban para el país receptor.
También me sorprende que, al ser el nuestro un Estado laico, los líderes de otras religiones asentadas en España, se indignen porque nos visite el Papa. Ni lo entiendo, ni lo comparto. Ahora viene el Papa y luego que vengan los demás, pero el añadido de Benedicto es que también es el Jefe del Estado de un Estado reconocido dentro de la Republíca Italiana, el Vaticano. Es como si vinieran Sarkozy o Berlusconi. Al Papa le reciben los Reyes, como hacen con los otros mandatarios. De Jefe de Estado a JEfe de Estado.
No entiendo la indignación ni las campañas en contra o a favor. Viene y punto.
En Galicia, celebra el Año Jacobeo y en Barcelona bendice la Sagrada Familia. Pues fenomenal ¡¡¡ y si de paso hace feliz a unos cientos de creyentes, pues tan ricamente. Eso suma no resta.
Estoy de acuerdo contigo..... no entiendo las reticencias de la gente demasiado agresivas para mi modo de ver las cosas..... no me gustan las imposiciones, pero este país a pasado de la caspa al suavizante de una manera vertiginosa y desde ciertos sectores se alientan formas de desprecio para mi incomprensibles hacia nuestra propia cultura. Todo tiene cabida y todo merece respeto. Todos los colores y las tendencias, pero no alcanzo a interpretar el porque de la indignación general ante la visita de un Jefe de Estado como otro cualquiera por mucho que sea lider espiritual de una religión que profesan millones de fieles .Quizás porque es demasiado retrógrada? quizás demasiado tendenciosa y culpabilizadora?....Seguro que si! pero luego algunos pretenden que comulguemos con ruedas de molino y nos meten con calzador otros ritos y costumbres que no pertenecen a nuestra cotidianeidad y pobre del que hable mal....
ResponderEliminarNo hay dos Españas, seguramente más de cinco o seis... y este si que es el pan nuestro de cada día.....
Sergio Reina
Sergio, es todo tan incomprensible. Llevo una semana escuchando comentarios de gente indignada y algunas son cosas rarísimas. Pues a mi me indigna más que venga Gadafi y le dejamos montar la tienda de campaña donde le apetece y nadie hace manifestaciones a su paso.
ResponderEliminarQuerida Carmen, cuando viene Gadafi, algunos también protestamos, cuando Chávez colapsa la Gran vía para ir a la casa del libro se sacan titulares, a otros nos parece mal tb cuando tratamos a Putin como si fuera un corderito o nos bajamos los pantalones ante Merkel o escuchamos atentamente al ministro de exteriores israelí, que no me generan tampoco ninguna simpatía.
ResponderEliminarLa iglesia Católica y el estado Vaticano que ocupa, nos ataca a muchos, nos rechaza, margina y minusvalora. Por eso a mi personalmente me escuece que parte del presupuesto de la fugaz visita de este individuo salga de las arcas públicas, porque yo pago impuestos encantado, pero no para que se invite al jefe de la Iglesia católica, a ése, que lo inviten sus acólitos, que como él niegan a millones de africanos protegerse del VIH, a miles de homosexuales formar familias, a centenares de víctimas del acoso sexual el resarcimiento que se les debe. Y no me reconozco en la tradición judeocatólica supuestamente española, soy del 78 y algunos de mi generación ya no fueron bautizados, otros somos apóstatas.
Ahora, si el el Estado Vaticano nos comprara millones en producto fabricado en España y generara con ello puestos de trabajo, o nos suministrara gas o petróleo, permitiera a nuestras empresas explotar sus recursos naturales, o estableciera algún tipo de tratado bilateral que interesara al país, entendería que el jefe de ese micro-estado multimillonario que es el Vaticano viniera a España, pero separando la paja del grano y dejando claro a qué viene y representando el qué.
A mi me parece que se trata de una visita más religiosa que política-y por lo tanto laica- por eso como ateo,español de 30 tacos y homosexual "yo no te espero".
Y todo lo digo convencido, razonando, desde el respeto al creyente, diferente a mi. Sin crispación, sin insulto ni violencia.
Sergei.
Querido Sergei, pero tu postura me parece fantástica, porque es razonada, es pacífica y es normal.
ResponderEliminarLo que no entiendo son las exaltaciones de ningún tipo o los comentarios disparatados es genial abrir un diálogo, razonar las posturas.
Me encanta tu postura.
bssss